La enfermedad causada por el hongo Phyllosticta Citricarpa se considera una de las patologías más importante del sector citrícola.
A raíz de ello, la mancha negra de los cítricos (MNC) genera preocupación entre los productores cítricos, debido a que observan caída prematura de las frutas y una merma en su valor de mercado por el daño estético que concibe su incidencia.
Para intentar paliar la situación, el INTA Yuto, en Jujuy, implementa una técnica molecular que permite la identificación precisa del patógeno, que representa una amenaza para la producción y la exportación.
Los laboratorios de Fitopatología y Biotecnología son claves para la detección de la enfermedad y los únicos habilitados para realizar estos diagnósticos en la región.
“El objetivo principal de este protocolo es brindar a la industria citrícola una herramienta efectiva y confiable para el diagnóstico rápido de esta enfermedad devastadora”, señaló Ceferino Flores, investigador del organismo, quien junto a su equipo de trabajo se esfuerzan por evitar pérdidas comerciales al momento de la exportación y proteger “la calidad” de los cultivos en el ámbito productivo.
MANCHA NEGRA DE LOS CÍTRICOS: TODO COMIENZA DESDE EL LABORATORIO
Los laboratorios de Fitopatología y Biotecnología del INTA Yuto son claves para el diagnóstico de la MNC en frutas, acelerando el proceso de exportación y brindando seguridad a los productores y exportadores.
Este logro representa un hito importante en la lucha contra esta enfermedad y en la protección de la industria citrícola argentina siendo el único laboratorio habilitado para realizar diagnósticos por esta técnica en Salta y Jujuy.
La PCR, siglas en inglés de ‘Reacción en Cadena de la Polimerasa’, es una prueba de diagnóstico que permite detectar un fragmento del material genético de un patógeno y, de este modo, detectar su presencia en frutos infectados.
“La técnica utilizada para mancha negra es una real time PCR o PCR en tiempo real lo que, además de detectar un agente causante de una infección, nos informa sobre el número de agentes causantes que existen, es decir, realiza una cuantificación”, indicó Flores.
El investigador, agregó que la detección se basa en un protocolo que se centra en la localización del hongo “mediante cebadores y sondas específicamente diseñados para la región ITS del ADN ribosomal 16S”.
CUMPLIR CON LA RESOLUCION
La Resolución de la EAPyA N° 0056/2008 aprueba el Programa de Certificación de Fruta Fresca cítrica para exportación a la Unión Europea y a mercado de similares restricciones cuarentenarias.
“El objetivo de esta normativa es garantizar que la fruta fresca cítrica producida en el NEA y en el NOA cumpla con las exigencias fitosanitarias establecidas en la normativa de la Unión Europea”, explicó Flores.
En ese contexto, señaló que, además, establece la obligatoriedad de adoptar diferentes medidas fitosanitarias en las sucesivas etapas del cultivo y reglamenta el procedimiento en las plantas de empaque y en el puerto.