En el Día de la Industria y ante la UIA, Milei sorprendió con una fuerte defensa del campo

En el Día de la Industria y ante la UIA, Milei sorprendió con una fuerte defensa del campo

El presidente Javier Milei encabezó este lunes un acto por el Día de la Industria en la Unión Industrial Argentina (UIA), oportunidad en la que sorprendió con una férrea defensa del sector agropecuario.

“Para proteger a la industria se le robó al campo, y esa protección lo único que generó es un sector industrial adicto al Estado”, fue una de las frases más fuertes de su discurso.

De hecho, consideró que esta forma de hacer política con el sector privado “es una de las raíces de las crisis económicas estructurales que padecemos desde hace tantas décadas”.

INDUSTRIA Y CAMPO, BAJO LA MIRADA DE MILEI

Según el mandatario, es un “mito” la idea de que el desarrollo industrial es incompatible con el sector agroexportador.

De hecho, aseguró que se trata de “un cuento” que “durante 100 años nos vendió la política”, según el cual para tener una economía pujante con crecimiento de la industria “debía darse pisoteando a los sectores primarios”.

Sin medias tintas, el Presidente opinó que el período de mayor expansión industrial argentino “fue durante el modelo agroexportador, y no con el modelo fracasado de sustitución de importaciones”, cuyo resultado fue que “la industria quedó subordinada al Estado con subsidios y aranceles” en una relación de “tutela viciosa” que “arrastramos hasta hoy”.

En tanto, en otro párrafo dirigido al agro, valoró la llegada de Starlinkg a Argentina, “mejorando la conectividad en toda la patria rural a costo cero”, y también “el caso de la vacuna contra la fiebre aftosa, cuya importación habilitamos hace unas semanas, garantizando una mejor competitividad y reducción de costos en la producción de carne”.

En este marco, citó como otro “mito” que “la libertad en la economía es perniciosa para el desarrollo industrial”, cuando “lo único que es pernicioso es tener un Estado elefantiásico montado a sus espaldas”.

En este sentido afirmó: “Vinimos a achicar el Estado para agrandar el bolsillo de ustedes. Esta administración está empecinada en reducir el costo argentino en la totalidad de la vida económica para mejorar la competitividad de todos los sectores productivos”.

A continuación, los puntos más destacados del discurso de Milei, según una recopilación realizada por la Oficina del Presidente:

“Quiero desmentir dos grandes mitos que durante décadas fueron utilizados por la política para meter la mano hasta el codo en el sector industrial y enriquecerse a costa de todos los que producen”.
“El primero es el que tacha de incompatible el desarrollo industrial en simultáneo con el de los sectores primarios de la economía”.
“Durante 100 años la política nos vendió el cuento de que para tener una economía pujante del desarrollo industrial debía darse pisoteando los sectores dinámicos y exportadores, en especial al campo”.
“Promediando la mitad del siglo pasado la industria quedó subordinada a la sobreprotección del Estado y eso generó una relación de tutela viciosa que arrastramos hasta el día de hoy”.
“La consecuencia es que, para proteger a la industria, se le robó al campo, y esa protección lo único que generó es un sector industrial adicto al Estado. Esta es una de las raíces de las crisis económicas estructurales que padecemos desde hace tantas décadas”.
“Perjudicaron a todos los argentinos porque nos obligaron a pagar más caro por productos de peor calidad, aumentando el costo de vida y reduciendo la capacidad de ahorro y la capacidad de inversión de todos”.
“La Argentina tiene prácticamente la misma cantidad de empleo formal privado que hace quince años. En definitiva, a ningún sector le puede ir bien si al conjunto de la sociedad le va mal, salvo a la casta política”.
“Tanta miseria terminó imponiendo un modelo de negocio distinto a muchos sectores. Ya no se trataba de pensar cómo producir más, mejor y más barato, sino de ver cómo acceder a la mayor cantidad de ventajas y prebendas posibles de parte del Estado para poder sobrevivir”.
“Quitarles a unos para darles a otros no es una política económica, es un robo que destruye la economía a largo plazo”.
“Cuando alguien les habla de potenciar la industria mientras se emite dinero por 13 puntos del PBI en un año, pisa el tipo de cambio hasta un tercio de su valor de mercado, y autoriza importaciones a pesar de que no están los dólares, esa persona no es proindustria, esa persona es un estafador y punto”.

“La mejor política industrial es tener una buena política fiscal y monetaria; honrar las deudas y recuperar la credibilidad del país; terminar con la inflación, recuperar el cálculo económico y devolverles a los argentinos los dones de la estabilidad”.
“Sólo si al conjunto de la sociedad le va bien, le puede ir bien a la industria de forma sostenible”.
“Si el valor de una compañía se mide de acuerdo al valor presente de los flujos futuros de esa empresa, la estabilidad es condición sine qua non para que su empresa valga algo”.
“No hay valor sin estabilidad, no hay ganancia sin estabilidad, no hay crecimiento sin estabilidad”
“Les dije que quería desarmar dos mitos. Ningún país quebró por abrirse al comercio internacional; todos los que lo hicieron progresaron”
“Esta administración está empecinada en reducir el costo argentino en la totalidad de la vida económica nacional para así mejorar la competitividad de todos los sectores productivos. Vinimos a achicar el Estado para agrandar el bolsillo de ustedes”.
“¿Saben cuál es el principal factor de incidencia en el costo financiero? El Riesgo País, ese Riesgo País que se ubicaba en el orden de los 2400 puntos el día del balotaje, y hoy se ubica en el orden de los 1400 puntos, gracias al trabajo apoteósico que está realizando ‘Toto’ Caputo, Santiago Bausilli, el gigante de Pablo Quirno y todo su equipo”.
“Ese mismo Riesgo País que sube cada vez que los degenerados fiscales del Congreso pasan leyes impagables sin decir de dónde quieren sacar la plata”

Roberto Urquía: “No hay ninguna duda que hay que apoyar a Milei; trabaja mucho”

“Lo primero que hicimos al asumir, y contra la opinión de los econochantas, fue arbitrar las tasas de interés local con la tasa de interés internacional ajustada por riesgo, que implicaba, dado una tasa de interés real negativa en pesos y que fue lo que permitió a su vez la licuación y el desarmado de los pasivos remunerados”.
“En 113 años de los últimos 123 siempre tuvimos déficit; los 10 que tuvimos superávit fue porque estábamos en default. Nadie en 123 años logró un superávit fiscal robusto y de verdad, y nosotros lo alcanzamos en el primer mes”.
“Los bancos tuvieron que volver a trabajar de bancos y prestar capital a personas y empresas en lugar de colocar su capital en el Banco Central inflacionando aún más la emisión de moneda para cobrar el interés”.
“Hace un año pensar pedir capital prestado a 30 años parecía una locura, y hoy, en la nueva Argentina, es una realidad”.
“La segunda cabeza de este monstruo que es el costo argentino, es el costo laboral, que se desprende de regulaciones vetustas que supuestamente pretenden proteger a los trabajadores, pero lo único que hacen es destruir el trabajo”.
“Hay una sola forma sostenible de que los trabajadores estén cada día mejor: un Estado que proteja el valor de su dinero y un sector pujante que demande trabajo. Cualquier regulación que atente contra el valor de la moneda y contra la capacidad del sector privado de generar riqueza lo único que genera es más pobreza”.
“Las leyes laborales en Argentina son para el trabajador lo mismo que la fracasada Ley de Alquileres a los inquilinos”.
“La tercera cabeza del monstruo es difícil de cuantificar porque es el costo invisible del Estado, la burocracia”.
“En Argentina tenemos cerca de 190 impuestos, de los cuales 10 recaudan más del 90% del total de la recaudación. O sea que hay cerca de 180 impuestos que no llegan ni al 10% de la recaudación. Estos impuestos nos generan un daño económico directo”.

En Rosario, Milei volvió a escuchar el reclamo por las retenciones: no hubo anuncios para el agro

“La semana pasada anunciamos la eliminación de trabas burocráticas para la importación de acero, aluminio y materiales de construcción, y venimos de eliminar burocracia relacionada con la industria del plástico y de los hilados sintéticos”
“Estamos simplificando los trámites de exportación, como el régimen de admisión temporaria y el de repo stock”
”Eliminamos todos los controles discrecionales para importar, entre los que se encontraba el sistema SIRA, que era un mecanismo explotado por la gestión anterior para cobrar coimas a importadores.
“En la nueva Argentina, ya nadie tiene que rendirle pleitesía a ningún burócrata por importar algo, y todo esto lo hacemos en pos de seguir mejorando la competitividad de nuestra economía”.
“El que produce debe enfocarse en producir y así capitalizar al máximo su tiempo, para luego poder disponer del fruto de su trabajo como se le antoje.”
“El Impuesto PAIS fue creado por el kirchnerismo bajo la excusa de que sería temporal y, sin embargo, se cansaron de prorrogarlo sistemáticamente”.
“No hay nada más permanente que un impuesto transitorio, salvo que se trate de un gobierno liberal que dice que va a bajar los impuestos y efectivamente lo baja, es decir, con nosotros”.
“Así como esta mañana bajamos un 10%, en diciembre se termina con el nefasto Impuesto País, lo que va a impulsar una baja en los precios de los productos importados”.

Ya es oficial la reducción del Impuesto PAIS y el tipo de cambio importador bajaría casi $ 100

“Hay que terminar con la creatividad de los burócratas, lo único que logran es convertir a Argentina en un infierno tributario y en una multiplicación de quioscos”.
“Así como bajamos el Impuesto PAIS, ya eliminamos las retenciones de más de cinco categorías de carne y el derecho de exportación para la industria automotriz, bajamos el impuesto a las transferencias de automóviles y aranceles de importación en productos de primera necesidad para distintos sectores productivos”.
“La lista de curros, quioscos y burocracias que le complicaban la vida a los argentinos es infinita. Y entre ellos se encuentra la quinta cabeza del monstruo que vinimos a combatir, el costo asumido por todos los argentinos para cuidar los negocios de los amigos del poder”.
“Un ejemplo es el caso de Starlink, cuya entrada permitimos ni bien asumimos, mejorando la conectividad en toda la patria rural a costo cero. O el caso de la vacuna contra la fiebre aftosa, cuya importación habilitamos hace unas semanas, garantizando una mejor competitividad y reducción de costos en la producción de carne”.
“Nosotros vinimos a bajar impuestos, no a subirlos, y el superávit fiscal para esta gestión es innegociable”.
“Ese es el pacto que hice con el pueblo argentino y entre nosotros cuando nos eligió en las últimas elecciones, y eso es lo que vinimos a cumplir”.
“El gasto público en el Tesoro Nacional en términos reales en lo que va del año cayó 30%”.
“Poco a poco, todos estos esfuerzos, tanto en el plano de corregir la macro como en el de las reformas estructurales, se están traduciendo en mejoras palpables en la actividad económica”.
“Si quieren ver un ejemplo claro de qué pasa cuando se reduce el costo argentino y se aumenta la libertad, miren el RIGI y ya esperamos inversiones por más de 50.000 millones de dólares”.
“Mejoramos el pago a importadores y, actualmente, estamos pagando el 90% de las importaciones versus el 15% que se pagaba en noviembre de 2023”.
“Podríamos hasta decir que salvamos al sector y, aún al día de hoy, con tantos anuncios positivos a cuestas, tenemos que escuchar algunos degenerados fiscales hablar de industricidio”.
“La reforma estructural que nosotros pasamos con el RIGI más el DNU es ocho veces más grande que la que hizo Menem. Eso lo hicimos con el 15% de la Cámara de Diputados y el 10% de la Cámara de Senadores. Vengan a decirme si eso no es gestión política”
“Han sido valientes al acompañar cuando celebramos el Pacto de Mayo en Tucumán porque eligieron dejar atrás ideas económicas y arquitecturas reguladoras dañinas pero profundamente arraigadas en el entramado productivo y comercial argentino”.
“Esta gran gesta que nosotros llamamos la guerra contra el costo argentino necesariamente va a implicar una transformación en el sector industrial. No hay que tenerle miedo al cambio”.
“A pesar de ser el país de la región con menor inversión extranjera de los últimos 15 años, somos al mismo tiempo el que más unicornios per cápita tiene”.
“Anímense a innovar y a competir porque no hay fuerza de la naturaleza más grande que un argentino queriendo hacer plata”.
“Con el aumento en competitividad que traerán las reformas profundas que estamos emprendiendo, va a haber un boom industrial genuino que todavía no podemos ni siquiera imaginar”.
“El cambio, para muchos, va a implicar, como decía el presidente Menem, aprender a andar en bicicleta sin rueditas. La mayoría seguramente va a hacer equilibrio, porque la reducción en el costo argentino compensará la eliminación de beneficios que eran perniciosos para el conjunto de la sociedad”.
“Sepan que en mí van a encontrar un aliado del sector privado. Son ustedes, junto a su esfuerzo, los que empujan para adelante, generan riqueza y puestos de trabajo”.
“Cuando el Estado genera riqueza lo hace para los políticos y cuando genera trabajo lo hace para sus amigos”.
“Nosotros lo que sí podemos hacer, y ya estamos haciendo, es remover todos los obstáculos que se encuentran en el camino, con la visión de hacer de la Argentina el país más libre del mundo, porque la Argentina, los argentinos y sus empresas tienen todo lo necesario para competir de igual a igual con los mejores”.

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