El INTA cumple 68 años: un repaso por sus últimos logros en investigación y desarrollo

El INTA cumple 68 años: un repaso por sus últimos logros en investigación y desarrollo

inta investigadores

“Impulsar, vigorizar y coordinar el desarrollo de la investigación y extensión agropecuaria y acelerar, con los beneficios de estas funciones fundamentales, la tecnificación y el mejoramiento de la empresa agraria y de la vida rural”.

Esos fueron los objetivos con los que, un 4 de diciembre de 1956, a través de un decreto, se creó el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).

Es decir, que este miércoles el organismo está cumpliendo 68 años desde su fundación, en un momento de mucha incertidumbre, debido al ajuste que decidió emprender el Gobierno de Javier Milei, con un “plan de modernización” que ya fue aprobado, pero que generó polémica desde sus inicios ya que se acusó al INTA de haber contribuido al “despilfarro de la política” en los últimos años.

En este contexto, desde INTA Informa compartieron un artículo en el que subrayaron que el Instituto “es el motor de la innovación y el desarrollo en el sector agropecuario que posiciona al país como un referente mundial en producción de alimentos”, e hicieron un repaso por sus últimos logros científicos, en muchos casos obtenidos en la labor conjunta con el sector privado.

“Si un área del INTA deja de ser de interés, esa gente va a tener oportunidad laboral en la agroindustria”

LOS LOGROS DEL INTA EN I+D

“A lo largo de estas seis décadas, el INTA imprimió una huella imborrable en el agro argentino. Entre sus logros más destacados se encuentran el desarrollo de más de 970 variedades vegetales inscriptas en el INASE que incluyen aromáticas, cereales, forrajeras, forestales, industriales, hortícolas, frutales, legumbres, oleaginosas y ornamentales son el resultado de programas y de proyectos de investigación”, menciona el artículo.

También subraya que las obtenciones incluyen desde cultivos tradicionales hasta aquellos con alto valor agregado como la primera variedad de algodón con fibras extralargas, el arroz de alta calidad Anguirú INTA y la avena Bonaerense INTA sin gluten.

Asimismo, se desarrollaron variedades ornamentales a partir de recursos genéticos nativos, como Mecardonia, Oxpetalum, Begonia y Calibrachoa, que se comercializan en Japón, los Estados Unidos y países de Europa.

Por otro lado, en el ámbito de la biotecnología y la genética, el INTA logró avances significativos en el desarrollo de cultivos más resistentes y productivos. El descubrimiento de enzimas clave para la germinación de las semillas, la secuenciación del genoma de la chicharrita del maíz, el desarrollo de semillas de trigo con granos más grandes, son ejemplos de esta labor.

EL INTA Y LA CHICHARRITA DEL MAÍZ

En este contexto, desde INTA Informa señalaron precisamente como un párrafo aparte a la labor realizada en relación a la plaga que causó estragos en la última campaña.

Recordaron al respecto que, a principios de 2024, las condiciones de altas temperaturas y abundantes precipitaciones, junto con el escalonamiento en las fechas de siembra del maíz derivaron en la rápida reproducción y migración de Dalbulus maidis.

Así, la expansión desde el norte argentino hasta la zona núcleo, del vector de patógenos que producen la enfermedad del achaparramiento del maíz, causó problemas en la fisiología y desarrollo de las plantas. Esta situación llevó a que especialistas de todo el país se unieran y trabajen codo a codo para controlarla.

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Producto de esto, se creó el Mapa Nacional de la Chicharrita. Un trabajo realizado por entomólogos de 21 unidades del INTA con el fin de monitorear la plaga para estudiar su evolución poblacional y estimar el riesgo epidemiológico.

“Resultó un conocimiento clave para promover estrategias productivas y sanitarias con vistas a disminuir la incertidumbre en cuanto al riesgo”, valoraron.

SANIDAD ANIMAL 

Otro aspecto que resaltaron fueron los avances logrados en cuando a la salud animal.

Sobre este punto, solo en el último año el INTA desarrolló vacunas y mejoró las prácticas de manejo para garantizar la salud y el bienestar animal, lo que se traduce en productos de mayor calidad y seguridad alimentaria.

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Ejemplos: el desarrollo de un test para el diagnóstico rápido de la tristeza bovina, la primera cepa vacunal contra la Leucosis bovina o la cepa argentina modificada contra el herpesvirus que ahora, gracias a un convenio de vinculación tecnológica, será transferida a la empresa Tecnovax SA.

“Todos desarrollos que permiten mejorar la salud y el bienestar de los animales, aumentar la productividad de los sistemas de producción y facilitar el comercio internacional de productos ganaderos”, enfatizaron.

Por estos motivos, insistieron: “En el marco de este nuevo aniversario, el instituto refuerza la articulación público-privada con la visión de aunar esfuerzos con el sector privado y con los productores. De hecho, mediante alianzas estratégicas se han desarrollado proyectos de investigación y transferencia tecnológica que han beneficiado a toda la cadena de valor”.

BIOINNOVO

Como otro ejemplo de esta interacción público-privada, se citó el trabajo de Bioinnovo, la empresa argentina que nació fruto de la alianza entre el INTA y Vetanco SA, y que en este 2024 celebró una década de desarrollo de soluciones biológicas para el sector agropecuario.

En ese marco, destacaron el desarrollo de Bionnovo IgY DNT –para la prevención de la diarrea neonatal en terneros–, y de Vedevax Block –primera vacuna recombinante direccionada contra la diarrea viral bovina–, un producto que trasciende las fronteras.

Además de venderse en la Argentina, se registró en Perú y Bolivia; está en proceso de registro en Paraguay, Uruguay y México, y en vías de presentase a registro en Sudáfrica y Brasil.

“A 68 años de su fundación, la institución se encuentra a la vanguardia de la investigación en agricultura, desarrolla nuevas tecnologías y soluciones para los desafíos del siglo XXI. Con el compromiso intacto con la innovación y la transferencia tecnológica, el INTA seguirá siendo el motor de desarrollo para el campo argentino”, concluyeron.

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