“Resulta indispensable alinear las políticas de regulación de las actividades vinculadas a la agricultura, la ganadería y la pesca, procediendo a una verdadera desburocratización y simplificación de los procesos en relación al Estado, productores, exportadores e importadores”.
Este párrafo forma parte de la resolución 8/2024 que emitió este miércoles la Secretaría de Bioeconomía de la Nación, y a través de la cual la dependencia que conduce Fernando Vilella derogó 12 normas que habían sido emitidas durante las presidencias de Néstor Kirchner, en 2006 y 2007, y de Alberto Fernández, en 2023.
“En atención al cambio de autoridades recientemente acaecido en todos los planos de la Administración Pública Nacional, y a las nuevas políticas públicas delineadas a efectos de un reordenamiento integral de la producción en general y de la reformulación de muchos de los regímenes jurídicos existentes, esbozados en el Decreto de Necesidad y Urgencia N° 70 de fecha 20 de diciembre de 2023, deviene pertinente proceder a una revisión integral de toda la normativa reglamentaria y complementaria dictada en el ámbito de esta Cartera, relacionada con las actividades agrícolas, ganaderas y de pesca”, argumenta la resolución.
Y continúa: “Las nuevas políticas del Gobierno Nacional propician perfeccionar el funcionamiento del Estado para lograr una gestión pública transparente, ágil, eficiente, eficaz y de calidad en la atención del bien común, reducir el sobredimensionamiento de la estructura estatal a fin de disminuir el déficit, transparentar el gasto y equilibrar las cuentas públicas, entre otras cuestiones”.
En dicho contexto, Bioeconomía asegura que han advertido la existencia de normas vinculadas con regímenes de control, operatividad, distribución, programas y/o de requerimientos de información o de cumplimiento de distintas obligaciones que, “con base en el estado actual de nuestra economía en general, han apartado a la Autoridad de Aplicación de tales regímenes de la celeridad que la función pública debe practicar, lo que en la actualidad se pondera”.
“Por todo ello y por razones de oportunidad, mérito y conveniencia en el contexto señalado, corresponde disponer la derogación de determinadas normas, a efectos de coadyuvar a un nuevo ordenamiento del plexo normativo que atañe al comercio interior en pos de tornarlo más simple, menos burocrático y más transparente”, agrega el texto normativo.
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DESBUROCRATIZACIÓN EN BIOECONOMÍA
En primer término, el Gobierno deroga las Resoluciones N° 1.154 del 12 de junio de 2006, 1.486 del 10 de agosto de 2006 y 2.296 del 2 de agosto de 2007, todas de la ex Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (ONCCA), y también deroga, del anexo de la resolución N ° 1.011 del 6 de febrero de 2007 también de la ONCCA, el fragmento correspondiente, exclusivamente, a la Metodología de Cálculo de Precio Bovino.
“Conste que se preserva íntegramente la vigencia del fragmento correspondiente a la Metodología de Cálculo de Precio Porcino que forma parte del citado Anexo”, aclara.
Al respecto, Bioeconomía amplió en un comunicado que estas normativas de la ex ONCCA son las que obligaban a los frigoríficos a informar el precio de las transacciones bovinas diariamente.
“Esta decisión responde a la búsqueda de simplificación, agilidad y transparencia en los procesos comerciales del sector agropecuario”, insistió.
En concreto, la decisión dispuesta por la Secretaría de Bioeconomía, a través de la Dirección Nacional de Control Comercial Agropecuario de la Subsecretaría de Mercados Agropecuarios, busca reducir la carga administrativa para los operadores del sector que, si bien continúan liquidando las compras/ventas de hacienda en AFIP y están analizadas a través de SIOcarnes (dependiente de esta Secretaría), destinaban tiempo y recursos a presentar los precios diarios al Sistema de Información de Precios Bovinos, que generaba un índice de referencia que el mercado no utilizaba.
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Esto, a diferencia del Sistema de Información de Precio Porcinos, relevante para su mercado.
“La decisión se tomó tras un análisis exhaustivo y reconociendo una demanda histórica del sector. Los datos obtenidos no eran útiles para el mercado, lo que llevó a la simplificación normativa. Como resultado, los operadores podrán enfocar sus esfuerzos en actividades más productivas, aliviando la carga administrativa y reduciendo costos”, explicaron desde la Secretaría.
Y completaron: “La Dirección Nacional de Control Comercial Agropecuario (DNCCA) continúa trabajando en el fortalecimiento del sector y en la optimización de los procesos comerciales, con el objetivo de garantizar la transparencia y eficiencia en el mercado agropecuario”.
LAS OTRAS DEROGACIONES
En tanto, la Resolución conocida este miércoles deroga también las siguientes resoluciones, todas del año pasado, y emitidas por el ex secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Juan José Bahillo:
N° 10, del 16 de enero de 2023
N° 39, del 9 de febrero de 2023
N° 41 del 13 de febrero de 2023
N° 352 del 28 de septiembre de 2023
Asimismo, se derogan las siguientes disposiciones, todas de la ex Subsecretaría de Fortalecimiento Productivo y Sustentable para Pequeños y Medianos Productores Agroalimentarios:
N° 1 del 6 de febrero de 2023
N° 4 del 4 de septiembre de 2023
N° 5 del 8 de septiembre de 2023
“La presente medida entrará en vigencia a partir del día siguiente al de su publicación en el Boletín Oficial”, finaliza la Resolución; es decir, que comenzará a regir a partir de este jueves 25 de abril.
